La CTA-A bonaerense marcho a 43 años de la Noche de los Lápices
A 43 años de aquella fatídica noche del 16 de septiembre de 1976 en la que la dictadura cívico-militar secuestró, torturó y desapareció a diez estudiantes que integraban en su mayoría la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), y que habían reclamado el derecho de un boleto estudiantil-secundario, miles de estudiantes secundarios movilizaron en La Plata junto a organizaciones sociales, sindicales y políticas para mantener viva la memoria y la lucha de les compañeres desaparecides.
La CTA Autónoma de Buenos Aires participó como cada año de la movilización reivindicando la lucha que llevaron adelante les estudiantes, en ese sentido Emiliano Hueravilo, secretario de Derechos Humanos de la CTA-A de Buenos Aires, «acompañando a los secundarios y universitarios en esta marcha donde recordamos a los compañeros que fueron desaparecidos por pelear por una educación pública de calidad y por sus derechos. Hoy a 43 años seguimos las organizaciones gremiales y los estudiantes peleando por el boleto estudiantil».
«El pueblo argentino recuerda muy bien a sus caídos, por eso hoy el pueblo se moviliza y sale a la calle para mantener viva la memoria y continuar los reclamos de los compañeros», enfatizó Hueravilo.
Florencia Morelli Paunero, secretaria de Derechos Humanos de la CTA-A regional La Plata-Ensenada, señaló que «la Central siempre ha estado en las luchas por los derechos humanos, protagonizando la militancia por la memoria activa, por la justicia, por la verdad». Y enfatizó que «debemos continuar la lucha de nuestros compañeros que fueron desaparecidos por pelear por sus derechos».
Asimismo Carlos Zaidman, de la Asociación Ex Detenidos Desaparecidos, recordó que «venimos a homenajear la militancia de los compañeros desaparecidos, y a decirles que siguen estando presentes, que los motivos por los cuales ellos lucharon seguimos peleando. Para poder lograr una patria mejor donde se pueda estudiar con tranquilidad, donde puedan haber organizaciones estudiantiles que puedan reclamar por lo que es justo y pelear por lo que es necesario».
Y concluyó remarcando que esta marcha «se da en el marco de un gobierno negacionista que intenta borrar las terribles huellas que dejó el terrorismo de Estado, no solo con una base ideológica, sino además para justificar las represiones actuales».