Apoyados en la precariedad laboral que venimos denunciando durante años, el gobierno encontró campo propicio para dejar a miles de trabajadores sin sustento en el Estado. El sector privado en el que se enmarca nuestra actividad ve en este hecho una señal verde para avanzar en ese sentido también y así aumentar sus ya extraordinarias ganancias a costa de los trabajadores.
A pesar de la gran transferencia de recursos realizada en los últimos años a los grupos económicos, para los trabajadores se mantiene el impuesto al salario. En el día de hoy el tan esperado anuncio por parte del gobierno consistió tan sólo en el aumento del mínimo no imponible a $30 mil pesos.
Reafirmamos que el impuesto al salario es un canon injusto y seguiremos exigiendo su completa eliminación.
Este 24 de febrero acompañaremos el paro de ATE porque es necesario defender todos los puestos de trabajo. Exigimos que se prohíban los despidos por un año y un aumento salarial que no sea inferior al 40%.
También nos movilizaremos en todo el país en contra la criminalización de la protesta social, en defensa del derecho a huelga y por la derogación de la Ley Antiterrorista», finaliza la declaración del gremio liderado por Ricardo Peidro, secretario Adjunto de la CTA Autónoma.