Audiencia pública en el Congreso contra la violencia laboral
La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) y el Bloque de diputados Nacional de Unidad Popular (UP) llevaron adelante en la Sala Uno del Anexo de la Cámara de Diputados una audiencia pública en la que presentaron el proyecto de ley para «terminar con la violencia laboral en el lugar de trabajo».
El 28 de Abril se conmemora en todo el planeta el Día Internacional de los Muertos y Heridos en ocasión del trabajo. Este año la Secretaría de Salud Laboral de la CTA, por decisión del Encuentro Nacional celebrado el 15 de marzo en Carlos Paz, programó como actividad central la presentación parlamentaria del anteproyecto de ley nacional contra la violencia laboral por entender que «la violencia es un fenómeno severo y extendido en todos los ámbitos laborales y configura una cara más de la explotación y la precarización».
En ese sentido, la legislación vigente para combatirla existe sólo en algunas provincias y está limitada al sector público. En la práctica se ha mostrado ineficaz para combatir el fenómeno. El anteproyecto de ley elaborado por la CTA abarca todo el país, tanto en el sector público como en el privado y busca apoyarse en una amplia participación de los trabajadores creando comités con poder de resolución en cada establecimiento. Por otra parte, es parte del grupo de proyectos de legislación popular que junto a la Ley de Riesgos del Trabajo, y la de Organizaciones Sindicales busca crear nuevos paradigmas en las relaciones laborales y la organización democrática de los trabajadores.
En palabras de Víctor de Gennaro, «es una profunda emoción poder seguir siendo parte de que el Congreso sea una construcción del poder popular. Reivindico una frase del defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino que me quedó picando: ’hoy que hablamos de tanta inseguridad individual, los países más seguros son los que tienen mejor distribución de la riqueza, mejor salud, mejor educación’. Lo que falta acá no es seguridad individual sino apuntalar un proceso de transformación».
El diputado Nacional y uno de los fundadores de la CTA agregó: «Nosotros estamos con este proyecto mostrando que se puede tocar tierra desde la experiencia de los trabajadores. El 8 de mayo se presentarán los otros proyectos de ley».
Estuvieron presentes en el encuentro Fabio Basteiro, Carlos Custer, Laura García Tuñón y Marta Maffei, entre otros legisladores, diputados y representantes de los trabajadores.
El secretario de Salud Laboral de la CTA y presidente de la Fesprosa, Jorge Yabkowski recordó que justamente en esa jornada se cumplía un año de la tragedia de Bangladesh en la que murieron más de mil obreros textiles y más de 3 mil resultaron heridos de gravedad: «las patronales no hicieron absolutamente nada. La violencia y la precarización forman parta de la acumulación del capital en la etapa actual».
Ante el salón colmado, Yabkowski agregó: «Nosotros no cambiamos salud por dinero. Hay una estrecha relación entre la salud laboral y la democratización de los sindicatos y la elección de delegados. La burocracia sindical tiene mucho que ver con la violencia laboral. Esta ley tiene como objeto central empoderar y crear ámbitos que puedan combatir la violencia». En ese sentido, subrayó que se piensa a la violencia como parte de la precarización: «estamos en contra de la concepción individual de la violencia, no es un capataz violento, un compañero violento. Hay leyes contra la violencia laboral en algunas provincias pero se pierden en los pasillos de la burocracia, queremos un debate a fondo en el Parlamento para crear organización dentro de los lugares de trabajo», finalizó.
A su turno, María Marta Terragno, abogada de ATE Córdoba, coordinadora de redacción del anteproyecto explicó que «en la redacción del anteproyecto tuvimos muy presentes cuáles son las causas de la violencia laboral. No podemos soslayar que se genera en un ámbito donde prima la precarización y en un marco de una economía de un capital agresivo en donde se destruyó de la seguridad social y la democratización de los derechos de los trabajadores».
La abogada señaló que el proyecto de ley entiende los derechos de los trabajadores como derechos en tanto personas: a la integridad, a expresar opiniones, a ser respetados. «Este proyecto apunta a defender los derechos humanos. Esta ley tiene ámbito de aplicación en el sector privado y el público y en cualquier tipo de contratación: trabajadores rurales, empleadas en casas de familia, a toda persona que preste un servicio y reciba una remuneración», agregó.
Por otra parte, Terragno describió el proyecto basado en tres ejes: el primero tiene que ver con «poner el foco en la prevención, el segundo en garantizar la participación de los trabajadores en las denuncias de violencia a través de delegados y el tercero le da a esta Comisión una faz más operativa con facultades de acción y resolución ante casos de violencia laboral». Retomando las palabras de Yabcokski, Terragno dijo también que «la violencia laboral viene de la dominación, no tiene una dimensión individual, hay que darle una dimensión colectiva».
Ernesto Contreras, responsable del área de Violencia Laboral del Consejo Directivo Nacional de ATE se refirió a la historia de lucha de los trabajadores contra la violencia laboral desde principios de siglo XX hasta la actualidad.
Por su parte, Antonio Riestra, diputado de la UP de Santa Fe dijo: «quería dejar alguna impresión sobre esto: en general hay leyes que son generales y que corren el riesgo que después se desvirtúen pero ésta es una de las leyes que está completita. Hay que defenderla y acompañarla».
Luego de las intervenciones centrales, hubo varios compañeros y compañeras que fueron contando diferentes situaciones de violencia en sus lugares de trabajo, al tiempo que reivindicaron la urgente necesidad de contar con esta nueva ley contra la violencia laboral en todas sus formas. Todas las intervenciones pusieron el eje en que para vencer el miedo para poder denunciar hay que hacerlo colectivamente.
Nota: Inés Hayes para ACTA
Fotografías: Walter Piedras