Facundo Astudillo Castro: Nuevas pruebas apuntan a la Bonaerense
Un reconocimiento en el cangrejal donde fueron hallados los restos del joven descarta la hipótesis de accidente. “Podés caminar hasta la vera del agua sin enterrarte, sólo te vas a embarrar”, dice un testigo. Mientras, los resultados del peritaje a los celulares de los policías complican su situación.
Si la hipótesis de que la desaparición forzada seguida de muerte de Facundo Astudillo Castro fue “un accidente” ya había sido rechazada por el Ministerio Público Fiscal, las nuevas medidas de prueba incorporadas a la causa en los últimos días confirman ese rechazo.
Se trata de un nuevo reconocimiento -realizado a instancias de la Fiscalía, la querella familiar y la Comisión Provincial por la Memoria (CPM)- en la ría de Bahía Blanca, lugar donde fueron hallados los restos óseos del joven, el 15 de agosto pasado.
Las conclusiones del nuevo peritaje dieron a conocer que las condiciones del suelo y las mareas de la zona no acreditan ninguna posibilidad de accidente. “Podés caminar hasta la vera del agua sin enterrarte, sólo te vas a embarrar. Tendrías que ingresar más de diez metros a la ría para que el agua te llegue a la altura de la rodilla”, describió durante el reconocimiento un pescador de la zona a la Agencia Andar.
La hipótesis de que el joven desaparecido el 30 de abril de 2020 había sufrido un accidente mientras caminaba por la zona del cangrejal era avalada únicamente por un informe del Instituto Argentino de Oceonografía, que fue recusado por el Ministerio Público Fiscal pero incorporado por la jueza federal María Gabriela Marrón, a cargo del caso.
Al reconocimiento se suman los recientes informes periciales que confirman coincidencias entre los trozos de turmalina secuestrados en el puesto policial de Teniente Origone y un patrullero de la policía local de Bahía Blanca que estuvo detenido varias horas cerca del lugar donde se encontró el cuerpo del joven a una semana de su desaparición. Facundo llevaba un colgante con esa piedra cuando fue visto con vida por última vez.
De descartarse por completo la hipótesis de accidente, la investigación debería profundizarse en la única línea alternativa: la participación de agentes de la Policía Bonaerense en el hecho.
Los hechos y el encubrimiento
El 30 de abril del año pasado, Facundo Astudillo Castro fue visto con vida por última vez, junto a personal de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, a la vera de la Ruta 3, cerca de la localidad de Teniente Origone. Es lo que último que se conoce con certeza. El 15 de agosto, su cuerpo fue hallado por pescadores en una zona de cangrejal de la ría del canal Cola de Ballena, en Villarino Viejo.
Junto a los restos óseos, uno de los pescadores señaló que se habían encontrado a pocos metros una zapatilla y otras prendas de vestir, lo que fue comunicado oportunamente al fiscal federal Santiago Ulpiano Martínez y el subcomisario de la Policía Federal José Pérez, quienes dirigían el operativo ese día. Sin embargo, los funcionarios no secuestraron esas pruebas. Esto ocurrió recién al día siguiente cuando la mamá de Facundo, Cristina Castro, vio la zapatilla junto al Equipo Argentino de Antropología Forense que ya estaba en el lugar.
Gracias a este nuevo testimonio, la CPM, en calidad de querella institucional por el Mecanismo Local de Prevención de la Tortura, ampliará sus denuncias contra el fiscal y pedirá la investigación sobre la actuación del policía. Ulpiano Martínez, por lo pronto, ya fue reemplazado por la fiscala federal de La Pampa Iara Silvestre, quien acompañó el nuevo peritaje.
“A pesar de los intentos por entorpecer la investigación, que las querellas venimos denunciando desde hace tiempo, tanto en la actuación del fiscal Ulpiano Martínez y la jueza Marrón, aún se sigue produciendo pruebas valiosas y que no hacen más que ratificar la hiper intervención policial en torno a los hechos de esta causa, en la desaparición el 30 de abril y en las circunstancias en que se encontró el cuerpo de Facundo”, señalaron desde la CPM.
El organismo también denunció a Marrón ante el Consejo de la Magistratura por mal desempeño en el ejercicio de sus funciones. La jueza ya había sido recusada tanto por las querellas como por los fiscales Andrés Heim, de la Procuvin, y Horacio Azzolin, de la Unidad Especializada de Ciberdelincuencia.
Por otra parte, se conocieron los primeros resultados de las nuevas pericias a los teléfonos celulares incautados a los agentes Xiomara Flores, Jana Curruhinca, Alberto González y Mario Sosa, miembros de la Policía Bonaerense. De ellos surge el particular contacto entre González, el policía que estaba cargo del destacamento de Teniente Origone y detuvo a Facundo en la ruta ese 30 de abril, y sus superiores; entre otros comentarios comprometedores.
Fuente: Canal Abierto