Evo ingresó acompañado del embajador de Bolivia en México José Crespo Fernández, su Canciller Diego Pary y el secretario General del SME, Martín Esparza. Se sentó en la cabecera de una mesa con una veintena de dirigentes que lo esperábamos ansiosos y en silencio, como temiendo que ese momento nunca ocurriese. Tras una pausa, con su inconfundible voz comenzó el saludo tan esperado: “Gracias hermanas y hermanos, gracias por la invitación, por su presencia, esta vez estamos acá en malos momentos”, y los aplausos fueron inevitables y el grito como un rezo “EVO NO ESTÁ SOLO”, también…
Entre las organizaciones que participaron del encuentro, además del Sindicato Mexicano de electricistas, se encontraban el Sindicato de trabajadores de la Universidad Autónoma de México (STUAM), la Central Campesina Cardenista (CCC), la Nueva Central de Trabajadores (NCT), la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC), La Central de Trabajadores Argentinos Autónomos de Argentina (CTA-A), y coordinadoras de Solidaridad con Cuba, Venezuela y Bolivia.
Evo recordó otras tantas veces en las que estuvo en México, como su participación en el año 1992 junto a Rigoberta Menchú en la campaña ’Quinientos años de resistencia indígena popular’, también rememoró los momentos de construcción de la Vía Campesina y “las luchas que llevamos con muchos de ustedes en la época de las dictaduras y en la resistencia a los gobiernos neoliberales”.
Nos miró, y dijo, «Sinceramente no sé por dónde empezar”, sonrió, nos miró con una atención que nos conmovió a todos los presentes, luego, volvió a sonreír. Así comenzó una reunión que se extendió más de una hora, reunión de compañeros y compañeras sindicalistas, de ’hermanos y hermanas’, como él nos nombró en varias oportunidades.
“Los medios de comunicación me preguntaban (acá también me preguntan) por qué me presenté nuevamente como candidato a presidente”, y empezó a explicar, “yo soy un dirigente sindical como ustedes y en mi país había una teoría que implementaron los norteamericanos que decía que (los sindicalistas) no podíamos participar en política, pero hoy somos muchos los sindicalistas que somos parte del gobierno, diputados senadores»
Y Continuó hablando: “Nunca hice rosca, cúpulas, siempre estaba con el pueblo y para esta cuarta elección la COB (Central Obrera Boliviana) en su último Congreso Ordinario planteó que el único candidato de los trabajadores era Evo Morales. Hasta ese momento nunca había habido tanto consenso para mi candidatura de parte de los trabajadores, incluso de muchos profesionales…, Yo entendí que seguíamos siendo una opción para los trabajadores y el movimiento indígena y campesino”.
“El golpe es sencillamente porque no nos perdonan quiénes somos y no nos perdonan las políticas económicas”.
“Cuando llegamos al gobierno la pobreza extrema era 38,2%, actualmente es del 15% y con una meta para el bicentenario en el 2025 del 5% de extrema pobreza, el salario mínimo nacional pasó de 50 dólares a 300 dólares» y luego destaca los avances en el proyecto de crecimiento económico sostenido de Bolivia, la recuperación de la renta energética la industrialización y los beneficios sociales que elevaron las condiciones de vida del pueblo boliviano. Evo repasó las acciones de su gobierno: “Nacionalizamos y luego comenzamos a industrializar y lo estábamos haciendo sin créditos internacionales, el 100 por ciento es inversión del Estado boliviano”, dijo.
“Conspiraron las grandes transnacionales”, aseguró, “y también las chilenas, que no quieren la competencia con las empresas del Estado boliviano como la relacionada con la gran industria del litio”.
Luego relató el brutal escenario de violencia en el que se produjo su renuncia: “auspiciado por la derecha racista y fascista, que con la policía y el ejército reprime a su pueblo”, habló también de los muertos, de la quema de las casas, del horror en el rostro de su pueblo… finalmente previó un futuro de mayor violencia.
Al finalizar el encuentro, desde el grupo de sindicalistas, campesinos e indígenas que estábamos ahí le hicimos saber que: “nuestro compromiso, el de todos los dirigentes que estamos aquí, es el de continuar en la defensa de la autonomía y la democracia de nuestros pueblos de América. Nos comprometemos a trabajar con el propósito de coordinar y continuar en la organización de acciones solidarias y la celebración de un acto para los próximos días en esta ciudad (DF, México) con el presidente Evo Morales. La lucha del pueblo boliviano contra el golpe de Estado es una lucha latinoamericana y caribeña”, le expresamos.
Nuestro compromiso como CTA Autónoma con Evo, el dirigente que dio inicio a una profunda reconfiguración del bloque socio político gobernante, que logró a través de un instrumento político desplazar a la élites neoliberales que monopolizaron el poder y la palabra en las últimas décadas e inaugurar una nueva hegemonía indígena popular, es inquebrantable”, así se lo expresamos, “Evo los trabajadores argentinos estamos acá para lo que necesites. Nuestra CTA Autónoma es tuya, estamos dispuestos, estamos acá y estaremos siempre. Cuenta con nosotros”
EVO no está solo.
Fuente: agenciacta.org