¡El Tonelero no se toca!
El Tonelero es un paraje ubicado sobre la margen derecha del Río Paraná a 10 kilómetros aguas arriba de la cabecera del Partido de Ramallo, en terrenos fiscales. Actualmente, este lugar se está viendo amenazado por un emprendimiento industrial de la empresa PTP Group que consta en la construcción de un puerto multipropósito. También está involucrada en este negocio la empresa estatal de gas ruso GAZPROM, que aportará capitales para materializar el proyecto. Ambas empresas han sido muy cuestionadas por el impacto medioambiental que han generado por ser altamente contaminantes.
La conservación de este lugar es crucial no solo por su valor histórico, ya que fue el escenario de algunas de las más importantes luchas por la soberanía Nacional, sino también por ser uno de los humedales más grandes de la provincia de Buenos aires. Los humedales cumplen la función de actuar como esponjas, colaborando con el drenaje de aguas superficiales, evitando inundaciones. Particularmente el Tonelero regula los ciclos (crecientes y bajas) del río, funciona como un poderoso filtro que alimenta las napas de agua y acuíferos de la zona y un valiosísimo espacio público que está en riesgo de perderse.
Mariana Rearte, integrante de la Asamblea “El Tonelero No Se Toca” y la ONG “Unidos por la vida y el medio Ambiente” remarcó la importancia de este humedal para la comunidad y el ecosistema de Ramallo y cuáles serían las consecuencias de la instalación del puerto en la ribera del río.
“El Tonelero nos sirve a nosotros como amortiguación porque más al norte tenemos un parque industrial que tiene un montón de industrias químicas, algunas de ellas trabajan con hidrocarburos y no tienen ningún control desde la provincia. Hay animales que mueren empetrolados, familias que viven al costado de las empresas, los chicos se queman los pies porque estas empresas largan todos sus afluentes sin tratar. Nos enteramos hace un tiempo que un chiquito nació con una malformación en el corazón y falleció a los seis meses”, detalló.
Respecto a la construcción del puerto sobre el humedal Rearte afirmó que “este puerto debería estar en una zona contra el mar, no en el río porque destruye toda la barranca, se draga de manera incontrolada. Se destruye todo lo que es la fauna del humedal, un lugar donde van a desovar los peces, donde hay aves que no hay en ningún lugar. En Ramallo habitan el 2% de las aves de la Argentina, y muchas de ellas son aves de humedal”.
El 16 de noviembre se va a tratar en el Senado de la Nación el ante el proyecto de Ley que tiene por objeto establecer los presupuestos mínimos para la conservación, protección, restauración ecológica y uso racional y sostenible de los humedales a fin de preservar los servicios eco sistémicos que estos brindan a la sociedad en todo el territorio de la Nación.
Para frenar el avance de las construcciones que destruyen estas áreas naturales “habría que hacer una especie de preservación de los humedales, que no se toque ningún humedal hasta que no salga la ley, y se haga el monitoreo y conteo de los humedales que tenemos en el país”, subrayó Rearte, que asimismo afirmó: “Tratamos de concientizar a la gente, que se sepa lo que vamos a perder y que no lo vamos a recuperar. Cuando se plante este megapuerto sobre el Tonelero el humedal se destruye”
Más del 20% del territorio nacional está en riesgo y resulta imprescindible debatir una ley que proteja los humedales de los intereses depredatorios de los empresarios, del agronegocio y de la especulación inmobiliaria que pretenden que no exista ninguna normativa, por mínima que sea, que proteja los humedales y les impida avanzar sobre ellos sin ningún control, arrasándolos irracionalmente.