La peor violencia es el hambre
Servicio Paz y Justicia, junto a su fundador y Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel y la Fundación «Che Pibe»,realizan un llamado urgente al Pueblo Argentino, invitando a las organizaciones sociales, sindicales, políticas, académicas, científicas, estudiantiles, indígenas, de DDHH, al movimiento campesino, empresarios, a todas las religiones, a unir fuerzas y movilizarse. Convoca a todas las personas a solidarizarse con quienes menos tienen, a sumarse a esta causa frente a la grave situación de HAMBRE que sufre nuestro pueblo, el próximo 8 de julio a las 15:30 horas en Plaza de Mayo, Ciudad de Buenos Aires.
El país atraviesa una profunda crisis de valores, con un Estado que desatiende sus responsabilidades y promueve políticas recesivas que abandonan a los sectores más vulnerables. Niños, jubilados, trabajadores, indígenas y campesinos son víctimas de la expulsión y el desempleo. El cierre de fuentes de trabajo empuja a miles de personas a la indigencia, la pobreza y el hambre. Es imperativo que actuemos juntos para enfrentar esta situación y brindar apoyo a quienes más lo necesitan.
Convocamos al pueblo a unirse en la lucha contra el hambre. En cada rincón del país, debemos generar redes solidarias y poner el AMOR en ACCIÓN. No es aceptable que, en nuestro país productor de alimentos, haya personas que pasen hambre. Esta situación es una ofensa a la dignidad humana, viola los derechos humanos y pone en riesgo la democracia.
Organizaciones internacionales como la FAO, ONU, OEA, UNICEF y UNESCO pueden contribuir significativamente en esta lucha contra el hambre es la peor de las violencias. Debemos defender la vida y la dignidad del pueblo y actuar antes de que sea tarde.
Desde este llamamiento, exigiremos a los poderes de la Nación que asuman sus responsabilidades. Instamos al Congreso a declarar de manera urgente la emergencia alimentaria en el marco de la Soberanía Alimentaria. El Poder Ejecutivo tiene la obligación de garantizar todos los derechos y debe cumplir con este deber. Asimismo, la Corte Suprema de Justicia debe proveer los mecanismos necesarios para que el derecho humano a la alimentación se efectivice. El hambre es la peor violencia.
Un gobierno que no está al servicio del pueblo, está contra el pueblo. Olvida que detrás de los números hay rostros de niños, jóvenes, hombres y mujeres que reclaman su derecho a vivir dignamente. Por esto es que hacemos un llamado a ser solidarios con quienes menos tienen. Necesitamos la unidad del pueblo y sumar fuerzas.
Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz