El femicidio, nuestra pandemia
Frenemos la pandemia de la desigualdad y la violencia de género. En doce días de aislamiento social, preventivo y obligatorio fueron asesinadas doce mujeres en el país. Desde la CTA Autónoma de Buenos Aires repudiamos esta realidad que atraviesan miles de mujeres en el territorio nacional y exhortamos al gobierno a que resuelva esta pandemia que se está llevando cada vez mas vidas.
En un marco mundial de pandemia generada por el COVID-19, entre las medidas de prevención que el Gobierno Nacional dictó para evitar la propagación del virus y el impacto de contagios de forma abrupta para no colapsar el servicio sanitario, se encuentra el aislamiento social obligatorio. El hogar, lo que debería ser un hábitat sano y familiar donde resguardarse puede tornarse un infierno para las mujeres atravesadas por las violencias. Convivir con su agresor, aisladas, es el escenario perfecto donde el hijo sano del patriarcado se mueve de forma impune violentado en todas sus formas a la mujer hasta llegar a la máxima expresión del Machismo: EL FEMICIDIO. En doce días de cuarentena hubo doce femicidios en todo el país.
La pandemia deja al desnudo el hambre, la pobreza, el hacinamiento y la precarización de la vida de mujeres y LGTB. También la importancia política de las tareas feminizadas de los cuidados (en la salud, la educación, los territorios, los hogares, en casas particulares). Es por esto que hoy se realizará un ruidazo federal a las 18 horas, para gritar que vivas, libres, desendeudadas y desprecarizadas nos queremos. ¡Basta de violencia de género! Visibilizar la violencia machista y los femicidios es necesario para alertar al Estado en medidas concretas.
En ese sentido la secretaria de Género, Diversidad e Igualdad de Trato y Oportunidades de CTA Autónoma de la Provincia de Buenos Aires, Alicia Meynard, expresó con profunda tristeza, de forma imperiosa y obligatoria «el repudio y visibilizacion de los doce femicidios cometidos durante la cuarentena».
«La pobreza estructural, la desigualdad, el hambre, la precarización, las políticas de cuidado y las violencias en todas sus formas se profundizan de cara al encierro y el aislamiento desigual, siendo las mujeres, el colectivo LGTB, niñes y adolescentes los primeros en sufrirlos», aseguró Meynard.
«Nos urge llamarnos a la reflexión, a repensar estrategias y acciones concretas y efectivas en conjunto con el Estado, quien debe evitar los femicidios, las Organizaciones Sociales y Sindicales para visibilizar, prevenir y erradicar la violencia en todas sus formas hacia las mujeres y el colectivo LGTB», apuntó Meynard. Y resaltó que «nuestra Central grita, sin dejar de poner el cuerpo, con prudencia y con todos los recaudos que estos tiempos nos imponen: ¡ni una mujer menos!».