El informe subrayó que la evolución salarial en el sector fabril no resultó homogénea y mencionó el avance de las remuneraciones en la industria alimentaria y aceitera, a contramarcha con los sueldos metalúrgicos. Al respecto, indicó que en 2006 el salario inicial de los trabajadores de la alimentación era apenas un 12% superior al de los operarios de la UOM, mientras que al cierre de la última ronda de paritarias esa diferencia ascendía al 36%.
Similar escenario verificó el informe en el análisis de la evolución de los salarios en las distintas ramas del transporte. Advirtió, en esa línea, que mientas hace 8 años el salario de un conductor de primera del sindicato de Camioneros era un 24% inferior al de un chofer de colectivo de corta distancia, esa relación se invirtió en la actualidad al punto que el sueldo de un camionero supera en 5% al de un colectivero ($ 13.056 contra $ 12.460). La misma disparidad se verifica, incluso, entre sectores de trabajadores sobre los que la UTA ejerce la representación sindical. Así, el sueldo de un boletero del subterráneo pasó de ser un 5% inferior al de un colectivero a percibir en la actualidad un 28% más que un chofer de pasajeros.
Por otra parte, en el análisis específico de los sueldos del sector público, el informe señaló que la mayor caída en términos reales correspondió a los trabajadores de la administración pública nacional, cuya actualización salarial solo superó a la inflación anual en 2011, mientras que en los años restantes se ubicó sistemáticamente por debajo del ritmo de crecimiento de los precios. En términos acumulados, a comienzos de 2015 el salario de convenio del sector se encontrará un 28,2% por de bajo de los niveles de principios de 2007.
Fuente: agenciaacta.org