Costureras a Domicilio: Trabajadoras del sector, enroladas en la CTAA, se reunieron con el Ministro de Trabajo Bonaerense
Una delegación de la CTAA provincial acompañó a las trabajadoras en el encuentro con el ministro Walter Correa. Fue este miércoles en la sede del ministerio en la ciudad de La Plata. Se planteó la precariedad en el sector y regularizar la actividad.
La reunión, que fue catalogada por las costureras como histórica, se dio en el marco de la labor que el Sindicato Argentino de Trabajo a Domicilio Textil y Afines, que participa de la CTA Autónoma, lleva adelante para que las miles de personas que en la provincia y en todo el país, que participan de la actividad, puedan acceder a todos los derechos laborales.
Estuvieron presentes en representación de la Central, Natalia Robledo, Rubén Beltrán y Juan Laurenzo, integrantes de la conducción de la CTAA bonaerense y de gremios del sector privado. Además participó Mónica Basterrechea, secretaria General del sindicato de trabajadoras textiles a domicilio, junto a una delegación de compañeros y compañeras del sector.
“La reunión fue muy buena. El ministro se interesó mucho en la propuesta. Hay una ley reglamentada para un registro de costureras a domicilio, pero está en desuso, por lo que la volverán a activar. Además hay un proyecto de Ley para actualizar con mejoras, el ministro se comprometió a que si este proyecto ya perdió estado parlamentario, él la iba a volver a presentar” explicó Robledo.
El sindicato fue creado en 2016 en Mar del Plata, pero el Ministerio de Trabajo no dio curso al pedido de inscripción y luego perdió el expediente. En todo el país existen casi medio millón de personas que ejercen la actividad. Cortan, bordan, estampan, tejen, todo a domicilio.
Así lo informó Basterrechea, la secretaria General del gremio “Somos costureras que trabajamos en casa para terceros. Nacimos en Mar del Plata con 13 costureras en el principio, después fuimos creciendo cada vez más, involucrándonos en conocer para qué empresas trabajan, en qué condiciones. Estamos en un mundo de precariedad total. Las costureras trabajan sin ningún beneficio, no tienen obra social, no tienen jubilación. Ponen sus máquinas, ponen la luz, hasta los hilos muchas veces. Una costurera no llega hoy a los 40 mil pesos mensuales”
La dirigente se refirió al trabajo gremial que realizan “Nos interesa concientizar sobre la necesidad que tiene la mujer, que además de cuidados, que hace en su casa, y la costura, que es su oficio, que tiene todos los derechos, como cualquier otro, pidiendo la ley lo vamos a conseguir. Le planteamos la necesidad de aplicar la Ley, de abrir los registros de trabajadores y dadores de trabajo, de mejorar la ley actual con un proyecto que ya se presentó”
A su vez señaló que “Estamos peleando por nuestra inscripción gremial, basados en que hay un convenio de trabajo domiciliario, que homologa el Ministerio de Trabajo de la Nación, la Cámara de la indumentaria y otros sindicatos, pero que nosotras no estamos en esa mesa de negociación de salarios o tarifas de trabajo a domicilio”
“Basados en los logros que han tenido las empleadas domésticas, creo que las costureras merecen la misma registración y la valorización de su oficio, tener negociación de tarifas, acceder a los derechos laborales, saber quiénes son los dadores de trabajo. Sostenemos casi el 80 % de la industria textil en el país. Las costureras nos unimos a la CTAA porque no nos pidieron recibo de sueldo para pertenecer”. Concluyó Basterrechea.
